El almacenaje de las cartas de jugador y de encuentro se vuelve un tema peliagudo cuantas más cajas de luxe, de saga o aventuras van cayendo en tus manos (de la ordenación ya intentaremos hablar otro día, que ese tema también se las trae).
Creo que este es el tercer intento de almacenaje eficiente que hago. Supongo que, como todos, empecé usando la caja del core para almacenar tanto cartas de encuentro como de jugador, durando poco el espacio.
Cuando el espacio llegó a su fin, decidí sacar las cartas de jugador y almacenarlas en 
carpetas de esas tan bonitas que venden a un módico precio, pero la alegria duró poco al llenar la segunda carpeta y darme cuenta que por cada carpeta me podía haber comprado una aventura, y que cada dos una caja de las grandes.
La busqueda y la fortuna me han hecho encontrar un par de cajas en papelería y centro comercial que de momento van a solucionar mis problemas de almacenaje al menos por un temporada, sobre todo para las cartas de encuentro, donde un compacto cajetón con tres cajones me va a permitir guardar hasta seis ciclos completos por cajón (sin contar las pesadillas), eso sí almacenando las cartas en vertical, a lo cual me cuesta acostumbrarme.
Ahora que ya tengo, lo que parece ser, un almacenaje definitivo, me queda otra: currarme unos separadores en vertical chulos, chulos. Pero eso va a ser otro tema.
He estado buscando las fotos de los distintos experimentos de almacenajes que he ido haciendo, os las dejo a continuación y les añado unas pocas de las nuevas cajas.
P.D. Nunca subestiméis el poder del cartón pluma.
Viajando con El Señor de los Anillos LCG 
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